Características fundamentales de una noticia
Tomado del libro: Periodismo,
Instructivo de Redacción
Autor: Agustín Cruz Paulino
Los
principales elementos que deben caracterizar a una noticia son:
La
veracidad
Comprendiendo por ésta el criterio de que los
acontecimientos divulgados a través de la noticia deben ser reales.
Objetividad
La
noticia debe centralizar su contenido en las cosas ocurridas. Por ejemplo, si
el gato mordió al perro, no podemos decir cosas divorciadas de esa realidad;
hay que decir las cosas como son y cómo ocurrieron.
.
Brevedad
La
abundancia de frases para decir algo causa malestar en el público; por eso la
noticia debe ser redactada con la menor cantidad de palabras posible, de manera
precisa sobre lo acontecido.
Claridad
En el
suministro de los datos que conforman la noticia que recibirá el lector, no
puede andarse con rodeos; debe informarse de manera directa, sin palabras
rebuscadas ni asuntos que se presten a confusiones, pues al leerse una noticia
la misma tiene que ser comprendida inmediatamente se vaya leyendo cada elemento
que envuelve lo ocurrido.
Novedad
Cuando
se habla de que la noticia debe ser novedosa algunas personas mal interpretan
ese criterio creyendo que se trata de relacionarlo con el sinónimo de rareza;
pero eso no debe ser así, porque la idea es otra.
La
palabra novedad, según los sinónimos que presenta una computadora, están relacionados
a primicia, invención, invento, idea, descubrimiento, improvisación, suceso,
acontecimiento, etc.
El
término rareza tiene como sinónimo los términos singularidad, particularidad,
originalidad, curiosidad, anomalía, extravagancia.
Como
puede apreciarse, la idea general que engloba el conjunto de sinónimos
referentes a novedad se encuentra asociado a algo nuevo, pues así lo dan a
entender las palabras primicia, invención, descubrimiento, suceso y
acontecimiento; mientras que la idea centralizada en el sinónimo rareza hace
referencia a curiosidad, singularidad, particularidad, originalidad, etc.
Por lo
antes dicho, podemos concluir diciendo que la novedad, sencillamente, debe
verse como algo nuevo, no como raro.
Cada
día que llega es un día nuevo. Cada hecho que ocurre es un nuevo suceso.
No es
lo mismo decir “Yo tengo un nuevo carro”, que afirmar “Yo tengo un carro
nuevo”.
“Yo
tengo un nuevo carro”, da a entender que hemos cambiado de vehículo, que
compramos o conseguimos otro automóvil; pero no estamos diciendo si ese nuevo
carro es usado o no.
“Yo
tengo un carro nuevo”, pone de manifiesto que el automóvil es nuevo.
Entonces,
en conclusión, debemos estar de acuerdo en que cuando nos referimos a que una
noticia es algo novedoso no estamos diciendo que es algo raro sino un hecho
nuevo.
Actualidad
La actualidad no tiene espacio
para analizarla como algo contrario a lo que realmente significa: algo que
acaba de suceder.
Generalidad
Los
teóricos de los asuntos comunicacionales afirman que la noticia debe tener un
carácter de generalidad, en el sentido de que debe ir destinada para toda la
sociedad; es decir, debe tener un carácter generalizado. Pero dentro de ese
grupo de teóricos hay una rama que, aunque no está totalmente en desacuerdo con
ese criterio, puntualiza que el carácter de generalidad en una noticia no debe
tomarse en cuenta en referencia a todos los entes de un país o una región, pues
existen las informaciones especializadas, al igual que medios especializados o
sectoriales, y ponen como ejemplo las noticias publicadas en revistas,
brochures, folletos y boletines que van destinadas a un grupo determinado, como
los miembros de una empresa, de un sindicato o de una comunidad.
Si
bien es cierto que esas cosas son ciertas, también hay que entender que el
criterio de generalidad en la noticia no está en contradicción, pues, aunque se
elabore una noticia en exclusividad para los miembros de un sindicato
determinado, la misma va dirigida a la generalidad de los integrantes de esa
entidad.
En el
caso de la generalidad, no se ha querido expresar que una noticia va dirigida a
todos los habitantes del planeta tierra, de un continente o de un país, sino a
la totalidad de los individuos que conforman una comunidad determinada,
pudiendo ésta ser una fábrica, un barrio, una ciudad, un país, un continente,
etc.
Interés
humano
Todo
comunicador social sabe que una noticia tiene un objetivo fundamental:
suministrar informaciones a las personas.
La noticia,
sin importar que se trate de la muerte o hechos heroicos de algunos individuos,
la salida al mercado de un nuevo producto, la aproximación de un fenómeno
atmosférico, o cualquier otra cosa, debe tener un elemento de movilidad
emocional y sentimental que los expertos comunicacionales llaman interés
humano.
Si las
noticias no logran sensibilizar, en algún grado, los sentimientos afectivos de
una persona, entonces, la noticia no ha cumplido la misión para la cual fue
creada. Si los individuos manifiestan algún grado de enfado, lástimas, alegría,
preocupación o cualquier otro tipo de reacción, se puede decir que la noticia
cultivó el interés humano.
Cercanía
Al
hablar de cercanía no únicamente nos referimos a la distancia física (metros,
kilómetros, etc.) que pueda haber entre el público que recibe la noticia y el
lugar donde han ocurrido los hechos a que ella se refiere.
La
cercanía debemos verla, además del elemento distancia, como algo que se
encuentra asociado a los factores humanos y familiares existentes entre el
hecho y el público.
Al
conocerse una información en la cual se diga que una serpiente se tragó un
niño, quienes la escuchen se sentirán afectados emocionalmente pensando en el
miedo, desesperación y dolor del niño, aunque no lo conozcan o el suceso se
haya producido en otro continente, a miles de kilómetros de distancia.
No
importa qué niño haya sido el afectado, la gente reacciona al saber que se
trata de un ser humano. El sentimiento no sería tan profundo si se tratara de
un perro, un gato, un caballo o una vaca. Sobre el interés de las personas
hacia las noticias, por su cercanía, lo trataremos más a profundidad en otro
capítulo.
Prominencia:
Es
normal ver lo que ocurre en una determinada comunidad cuando alguna persona de
gran renombre (senador; diputado; alcalde; sacerdote; dirigente político o
comunitario, etc.) es afectada por ciertos asuntos que provocan la creación de
una noticia. Imaginémonos que ganó un importante premio, se murió, fue asaltada
o hizo algo que la gente se ve obligada a comentar, ya sea por muy positiva o
negativa. La gente habla del suceso de boca en boca. Contrario ocurre a si eso
le aconteció a una persona común y corriente de ese mismo lugar.
Secuencia
Si por
algunas circunstancias el hecho acabado de ocurrir tiene relación con otro ya
pasado, éste último adquirirá mayor importancia en el público, debido a que el
mismo podría ser una noticia que la población estuviera esperando u otra que le
llegue de sorpresa.
Por
ejemplo: Se ha anunciado que el presidente hablará esta noche, y la población
espera que hable sobre ciertas cuestiones. Cuando se da a conocer lo dicho por
el mandatario, la noticia tendrá una mayor reacción de la población, porque
estaban esperando un pronunciamiento al respecto.
La
policía ha estado buscando a un malhechor que cometió un grave delito (mató,
robó, se había escapado de la cárcel, etc.), y en los medios de comunicación se
informa que ya ha sido apresado. Sin lugar a dudas, la gente, aunque no lo
exprese, se siente con algún síntoma de emoción en torno al suceso.
El
buen redactor sabe sacarle provecho informativo a las noticias que resultan ser
secuencias de otro acontecimiento; e incluso, al ocurrir hechos secuenciales
los periodistas no dejan pasar las oportunidades para hacer más importantes los
hechos acontecidos que conforman la secuencia.
Agilidad
La
noticia debe ser ágil, debe darse a conocer casi al instante de producirse,
pues ésta es una de las características que en el mundo informativo ha
adquirido más atención en la población.
Cuando
ocurre un huracán, por ejemplo, la gente quiere saber todos los pormenores de
lo que está ocurriendo durante su trayecto: el impacto de las ráfagas iniciales
al llegar a un determinado lugar; su agresividad al estar sobre esa localización;
los resultados de su paso por el sitio, etc. Algo parecido ocurre cuando se
está llevando a cabo la realización de algún juicio que ha adquirido
notoriedad, la gente quiere saber qué está ocurriendo; y si hablamos de las
medidas urgentes a tomarse en las bolsas de valores, el precio del barril del
petróleo, el interés de los sectores que tienen algo que ver con esas
cuestiones es mayor.
Procedencia
El
lugar desde el cual proviene una noticia influye en su importancia.
No es
lo mismo lo dicho por un fiscal que por un delincuente; a veces a uno se le
cree más que al otro.
Si
hablamos en el ámbito político, se entenderá que una acusación a un candidato a
la presidencia de la república no tendrá el mismo efecto noticioso si la hace
un diputado que si la misma proviene por un candidato opositor.
Lo
mismo sucede con los países. No es igual lo dicho por un gobierno de un país
pequeño, quizás muy pobre, que lo expresado por el presidente de una de las
grandes potencias.
En el
contexto de la procedencia se pone de manifiesto el criterio de la siguiente
frase: “Dime quién lo dice, para reflexionar en sus consecuencias” (Tomada del
libro Mis pensamientos, de la autoría de quien suscribe).
Consecuencia
La
consecuencia proveniente de la publicación de un hecho es un elemento muy
discutido en la actualidad en los círculos periodísticos. Algunos son de
criterio de que ningún hecho puede quedarse en los archivos, por temor a lo que
pueda suceder si se dan a conocer ciertas informaciones.
El
temor a la publicación de informaciones relacionadas con ciertos hechos, me
atrevo a decir, no proviene del quehacer mismo del ejercicio periodístico sino
de intereses políticos y económicos, especialmente justificados por las grandes
potencias económicas, las cuales hasta cierran medios de comunicación,
encarcelan periodistas y lo inhabilitan para ejercer su profesión.
El que
así no lo crea que investigue del porqué no se dan a conocer las barbaries
cometidas por las partes envueltas en un conflicto bélico; las reales causas
que provocan la subida del precio del barril de petróleo; los beneficios
económicos que reciben determinados sectores que se esconden detrás de las
llamadas medidas de seguridad que aplican los gobiernos para obligar a la
población a pagar impuestos, restringir ciertas facilidades de servicios y las
inversiones a que son sometido los empresarios al verse obligados a comprar
costosos aparatos tecnológicos para vigilar las acciones delictivas, las cuales
en sí no impiden la ocurrencia de los crímenes.
La
consecuencia de la publicación de una noticia siempre estará en tela de juicio,
debido a que quienes creen en una democracia sin secretos estiman que el flujo
mismo de las informaciones constituye una herramienta que caracteriza al
sistema democrático, y que no hay razones para dejar de decirle al público las
cosas que ocurren con todos sus pormenores.
Quizás
por esas razones han sido tan cuestionadas actitudes gubernamentales, como
aquellas asumidas por el presidente Barack Obama de prohibir las publicaciones
de las fotografías y vídeos relacionadas con la supuesta muerte de Osama Bin
Laden; o las condenas de diversos países hacia las publicaciones de los famosos
mensajes electrónicos que comenzó a publicar el señor Julián Assange, a través del portal electrónico WikiLeaks, referente a las opiniones de embajadas de
Estados Unidos en relación a gobiernos, funcionarios y políticos de diferentes
partes del mundo.
Por esa supuesta “Seguridad de Estado” que aplican los
gobiernos en todos los países del mundo se esconden acontecimientos y
documentos que podrían cambiar el destino mismo de ciertas naciones. Hay
países, como Rusia, Inglaterra, Estados Unidos, Francia, China, Japón, Corea,
Cuba y otros, que mantienen en secretos millones de documentos que nadie sabe
cuándo la humanidad podrá tener la oportunidad de conocerlos; lo que, en
nuestra humilde opinión, se constituye en una violación flagrante a la libertad
de información que tiene la población.